piso arriba
lo que logre en dos minutos
o despedirme
o dar gracias
de nada
hago poco pero no muero otro dia
te saludo o no te saludo
y de algun modo involuntario
puedo hablar de ti
el siguiente martes
que parece ser de nuevo este
estoy en el pequeño salto
antes de que duerma
sobre mi el piso,
mas tiempo
que la vida que conozco
no es que llegue aqui
es que vengo saltando de algun lado
del sueño oscuro al sueño que oscurece
la orca que va del agua al agua
y despierta con la panza al sol
antes de integrarse
de vuelta volteada
al sueño del agua
la reja del sol en la pestaña
sube el cafe con la trampa de otro dia
escondida entre el azucar
que sobrevive sin cuchara
al resto de los dias
que son esta mañana
sin esfuerzo como testigo
recibo a mi pesado cuerpo de sueño
al sueño involuntario de otro dia
nos arrastramos al desayuno al baño
y si podemos evitarlo sin trabajo
a algun oficio
aunque mire para atras
la escalera sube
para depositarme justo
a los pies entumidos
del mismo elevador
miro la ciudad un jueves
por encima de sus hombros
y sin volver a proponerme
me sobra
me recibe lo que miro
o despedirme
o dar gracias
de nada
hago poco pero no muero otro dia
te saludo o no te saludo
y de algun modo involuntario
puedo hablar de ti
el siguiente martes
que parece ser de nuevo este
estoy en el pequeño salto
antes de que duerma
sobre mi el piso,
mas tiempo
que la vida que conozco
no es que llegue aqui
es que vengo saltando de algun lado
del sueño oscuro al sueño que oscurece
la orca que va del agua al agua
y despierta con la panza al sol
antes de integrarse
de vuelta volteada
al sueño del agua
la reja del sol en la pestaña
sube el cafe con la trampa de otro dia
escondida entre el azucar
que sobrevive sin cuchara
al resto de los dias
que son esta mañana
sin esfuerzo como testigo
recibo a mi pesado cuerpo de sueño
al sueño involuntario de otro dia
nos arrastramos al desayuno al baño
y si podemos evitarlo sin trabajo
a algun oficio
aunque mire para atras
la escalera sube
para depositarme justo
a los pies entumidos
del mismo elevador
miro la ciudad un jueves
por encima de sus hombros
y sin volver a proponerme
me sobra
me recibe lo que miro